Me la he pasado usando mis llaves magicas que me permiten usar las puertas para transportarme hacia donde yo lo desee.
En mi cueva conservo una puerta de madera caova que uso para poder ir a las habitaciones de los niños de corazones egoistas y oscuros, no es que sea alguien muy moralista pero es lo que me permite hacer mas facil mi trabajo. Me avalanze entre las sombras entrando a la habitacion de un niño y hacercandome lentamente hacia su cama lami su frente borrando toda el agua bendita que este debia tener y haora que perdio su proteccion divina tendra problemas en los duros golpes de las fuerzas del mandinga. Apenas noto que alguien estaba en la habitacion se levanto de golpe y con una voz calmada y un movimiento de mis manos la deje quieto con hipnosis para despues tomarle de la mano y este me obedecio sin mucho problema caminando hasta la puerta donde use una de mis llaves y lo lleve a mi cueva.
Este parecia tener algo de conciencia y me pregunto.
"Por favor no quiero esto".
"No hay nada de lo que te puedas quejar, no te he hecho nada malo todavia, si es mi cueva lo que te molesta pues mucho tiempo no te quedaras. He vivido años recolectando niños como tu y que mas que tratarse de alguien temperamental tu disfrutabas del sufrimiento de animales y solo te preocupabas por ti mismo".
"Prometo no volver a hacer nada asi pero por favor,por favor" dijo en un tono fuerte y con lagrimas en los ojos.
Lo termine de llevar al bosque donde hize que se olvidase de todo hasta que no sea enconteado y vagase en los alrededores.
Es divertido tener ese poder y me entretiene mirar a las personas, vaya criaturas que son tan facinantes y viven tan poco.
Volvi a la cueva y me acoste a relajarme en un asiento que encontre desde hace tiempo, me pregunto donde estaran mis hermanos? Eramos 7 pero por alguna razon estos no se trataban de duendes como yo; ellos eran muy diversos, muchos recuerdos no funcionan tan bien, de todas formas nunca recordamos algo completamente como realmente es,usamos nuestra creatividad para unir los puntos.
Tome otra llave que habia guardado para otro pequeño que se obsesionaba con los duendes y su mictisismo, quiza me pueda dar un poco de compasion, aunque ¿hago este tipo de cosas por que debo o por que quiero?.
Use de nuevo la llave y me oculte en un armario en la casa del pequeño para poder observarlo y seguir escribiendo de ello, es casi como tomar apunte de un evento historico y me parece entretenido entender mas de esta trama...
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